Narrador testigo (características, tipos y ejemplos)

El narrador testigo es la voz de un texto narrativo que relata los acontecimientos que observa como personaje secundario de la historia. Se trata de un personaje observador que narra lo que le sucede al protagonista.

Utiliza la primera persona del singular (yo) y, con menos frecuencia, la del plural (nosotros, nosotras). Sin embargo, esta persona puede virar a la tercera, en tanto relata los hechos que les suceden a otros.

Ejemplo de narrador testigo:

Y es que de noche, en casa de mis abuelos, seguían pasando cosas como si nada, como si fuera peligroso el que todo se quedara quietecito y en silencio. Por una parte, estaba aquella cháchara de nuestros antepasados del mirador y, por otra, el trajín interminable de tío Ricardo. Tío Ricardo era el hijo menor de la bisabuela Carmen, mucho más joven que mi abuelo y que tío Antonio y tía Victoria. Tío Ricardo estuvo siempre como una cabra, pero llevaba todas sus manías con mucha dignidad y desenvoltura. Solo salía de noche de sus habitaciones del piso bajo, siempre llevaba el pijama puesto y nunca comprendía cómo los demás podían hacer tantas cosas seguidas sin aturullarse.

El palomo cojo, de Eduardo Mendicutti

Es importante no confundir los conceptos de narrador y de autor (o escritor). El narrador es la voz que relata la historia, es decir, una entidad ficticia creada por el propio autor. En cambio, el autor es la persona que escribe el texto que se está leyendo, y que decide entre muchas otras cosas qué tipo de narrador va a utilizar.

Ver además: Tipos de narradores

Características del narrador testigo

Las principales características del narrador testigo son:

Es un narrador homodiegético, porque constituye uno de los personajes de la historia, aunque no su protagonista.
Tiene un estilo de lenguaje especial, que carga con su subjetividad y su propia jerga.
Relata la historia a través de lo que sus sentidos perciben de forma parcial, es decir, solo narra lo que vio o escuchó, o lo que los otros personajes le contaron.
No tiene acceso a los pensamientos ni a las emociones de los otros personajes, a menos que estos se los confíen.
Puede contar los hechos que se imagina, reconstruyendo lo que le pasó a otro personaje, como un investigador o un historiador.
Suele explicar de dónde obtiene la información.
Dispone de una cantidad de información limitada, que puede ser mayor, igual o menor a la que dispone el protagonista del relato.

Tipos de narrador testigo

Existen tres tipos de narrador testigo: presencial, impersonal e informante.

Narrador testigo presencial. Narra los acontecimientos que presenció, pero en los que no intervino o participó de forma limitada. Suele ser un personaje secundario que está en un puesto de observación privilegiado para narrar la historia de otros. Sin embargo, también suele hablar de sí mismo, de sus pensamientos y conjeturas. El relato puede estar en tiempo presente o en pasado. Por ejemplo:

Menos mal que la tarde se ha hecho menos fría y a veces el sol, aguado, ilumina las calles y las paredes; porque a esta hora deben estar caminando en Puerto Nuevo, junto al barco o haciendo tiempo de un muelle a otro, del quiosco de la Prefectura al quiosco de los sándwiches. Kirsten, corpulenta, sin tacos, un sombrero aplastado en su pelo amarillo; y él, Montes, bajo, aburrido y nervioso, espiando la cara de la mujer, aprendiendo sin saberlo nombres de barcos, siguiendo distraído las maniobras con los cabos.

Me lo imagino pasándose los dientes por el bigote mientras pesa sus ganas de empujar el cuerpo campesino de la mujer, engordando en la ciudad y el ocio, y hacerlo caer en esa faja de agua, entre la piedra mojada y el hierro negro de los buques donde hay ruido de hervor y escasea el espacio para que uno pueda sostenerse a flote.

“Esbjerg, en la costa” de Juan Carlos Onetti

Narrador testigo impersonal. Se limita a narrar los sucesos que ve o escucha, pero de los que no participa. Es impersonal porque no tiene personalidad, es decir, el “yo” suele estar desdibujado. Generalmente utiliza el tiempo presente, en tanto se puede asemejar a una cámara cinematográfica que va narrando lo que filma. Por ejemplo:

La mujer se va por la acera, camino de la plaza de Alonso Martín. En una ventana del café que hace esquina al bulevar, dos hombres hablan. Son dos hombres jóvenes, uno de veintitantos y otro de treinta y tantos años; el más viejo tiene aspecto de jurado en un concurso literario; el más joven tiene aire de ser novelista. Se nota enseguida que lo que están hablando es algo muy parecido a lo siguiente:
-La novela la he presentado bajo el lema «Teresa de Cepeda» y en ella abordo algunas facetas inéditas de ese eterno problema que...
-Bien, bien. ¿Me da un poco de agua, por favor?
-Sin favor. La he repasado varias veces y creo poder decir con orgullo que en toda ella no hay una sola cacofonía.
-Muy interesante.

La colmena, de Camilo José Cela

Narrador testigo informante. Narra los acontecimientos a través de una transcripción, como si estuviera escribiendo un informe, nota de prensa, reporte o un documento oficial. Presenta los hechos como auténticos y por lo general están descriptos en pasado. Por ejemplo:

Dicen (lo cual es improbable) que la historia fue referida por Eduardo, el menor de los Nelson, en el velorio de Cristián, el mayor, que falleció de muerte natural, hacia mil ochocientos noventa y tantos, en el partido de Morón. Lo cierto es que alguien la oyó de alguien, en el decurso de esa larga noche perdida, entre mate y mate, y la repitió a Santiago Dabove, por quien la supe. Años después, volvieron a contármela en Turdera, donde había acontecido. La segunda versión, algo más prolija, confirmaba en suma la de Santiago, con las pequeñas variaciones y divergencias que son del caso. La escribo ahora porque en ella se cifra, si no me engaño, un breve y trágico cristal de la índole de los orilleros antiguos. Lo haré con probidad, pero ya preveo que cederé a la tentación literaria de acentuar o agregar algún pormenor.

“La intrusa”, El informe de Brodie, de Jorge Luis Borges

Diferencia entre narrador testigo, omnisciente y protagonista

Las diferencias entre narrador testigo, omnisciente y protagonista radican en el punto de vista y perspectiva con que cada uno de estos narradores relata la historia.

Así, el narrador omnisciente está por fuera de los acontecimientos narrados, a los cuales refiere sin hacer alusión a sí mismo. Para esto, utiliza exclusivamente la tercera persona y suele tener mayor información que los propios personajes de la historia. Otra diferencia radica en que el narrador omnisciente, a diferencia del testigo, puede anticiparse a los sucesos.
Un ejemplo de narrador omnisciente es: Esperaron que cambiara la luz del semáforo y cruzaron la Avenida Santa Fe hacia Arenales. Habían tomado el subte en Constitución y habían hecho una serie de combinaciones, vigilando que nadie los siguiera. (Plata quemada, de Ricardo Piglia).

Por su parte, el narrador protagonista se parece al narrador testigo en tanto ambos participan de los acontecimientos narrados, es decir, ambos constituyen personajes del texto narrativo y cuentan la historia desde adentro utilizando la primera persona. La diferencia entre el narrador testigo y el protagonista es que este último es el personaje principal, que cuenta su historia. En ambos casos, el conocimiento que comparten es parcial y limitado, restringido a la subjetividad del personaje.
Un ejemplo de narrador protagonista es: La fatiga se apoderaba de mí. No podía ni siquiera terminar una oración. Quiero decir, una sintaxis decente… (Prins, de César Aira).