Características del género narrativo

El género narrativo es el conjunto de textos literarios que tienen una trama, es decir, una sucesión de eventos relatados por un narrador. Además, en este tipo de textos, hay uno o varios personajes que llevan a cabo acciones en un tiempo y un lugar específicos.

En el género narrativo se incluyen distintos tipos de textos con cualidades muy diversas, como la novela, el cuento, la epopeya, el cantar de gesta, la fábula, el mito y la crónica.

Importante: El hecho de tener un narrador que relata una historia es la característica que diferencia al género narrativo de otros géneros, puesto que en el género lírico no se cuenta una historia, sino que se expresa la subjetividad del yo poético, es decir, sus sentimientos y emociones; y en el género dramático, sí hay una trama, pero no es narrada, sino representada por los personajes.

Ver además: Características de un texto narrativo

Las características de los textos del género narrativo son:

Tienen determinados elementos

Los elementos que están presentes en cualquier texto del género narrativo son:

Narrador. Es la voz que relata la trama y realiza las descripciones.
Personajes. Son las personas, dioses y animales u objetos personificados que realizan las acciones.
Trama. Es la sucesión de eventos de la historia y se caracteriza por incluir un suceso que es sorprendente o que plantea un problema a resolver.
Espacio. Es el lugar o los lugares en los que se desarrolla la trama.
Tiempo. Es el momento o los momentos en los que se desarrolla la trama.

Importante: Existen distintos tipos de narradores que se clasifican según:

La persona que emplean para narrar. Puede ser narrador en primera, segunda o tercera persona.
El grado de conocimiento sobre lo que sucede. Puede ser narrador omnisciente, equisciente o deficiente.
Su participación en la trama. Puede ser narrador protagonista, interior o testigo.

Además, también existen distintos tipos de personajes que se clasifican según:

Su participación en la trama. Puede ser principal o secundario.
Su rol en la trama. Puede ser protagonista o antagonista.
Según su caracterización. Puede ser redondo o plano.
Según su evolución. Puede ser dinámico o estático.

Tienen una estructura

La estructura de los textos breves del género narrativo consta de tres partes:

Introducción. Es la parte en la que se presenta a los personajes y el contexto que representa la normalidad de la trama.
Nudo. Es la parte en la que se narran los eventos más relevantes y en la que se hace referencia a un suceso que modifica o que presenta un problema en relación con la normalidad de la introducción.
Desenlace. Es la parte en la que se resuelve el problema del nudo y se vuelve a la normalidad de la introducción o en la que se cierra el relato sin ningún tipo de solución.

Los textos más extensos del género narrativo no suelen valerse de esta estructura, puesto que incluyen una gran variedad de personajes y eventos y, por lo tanto, puede haber más de un suceso que presenta un problema.

Incluyen descripciones

Las descripciones nombran las cualidades de las personas, los objetos, los lugares, los momentos, entre otros. Los tipos más comunes de descripción del género narrativo son:

Prosopografía. Es la descripción de las cualidades físicas de un personaje.
Etopeya. Es la descripción de las cualidades psicológicas, morales e intelectuales de un personaje.
Retrato. Es la descripción tanto de las cualidades físicas como de las psicológicas, morales e intelectuales de un personaje.
Topografía. Es la descripción de lugares reales.
Topofesía. Es la descripción de lugares imaginarios.
Crinografía. Es la descripción de un objeto.
Cronografía. Es la descripción de una época.

Incluyen diálogos

Aunque no todos los textos del género narrativo tienen diálogos, puesto que algunos solo se focalizan en narrar, en una gran parte de ellos hay diálogos que representan las conversaciones de los personajes y que pueden ser:

Diálogo directo. Se representan todas las palabras que dicen los personajes y cada comentario se introduce con un guion largo.
Diálogo indirecto. El narrador hace referencia a aquello que dicen los personajes.

Suelen estar en prosa

En el presente, los textos del género narrativo suelen estar en prosa, es decir, una escritura que es continua. Sin embargo, algunos más antiguos, como el romance y la epopeya, están en verso, puesto que cada línea de la composición tiene una extensión, una rima y un ritmo determinados.

Suelen ser ficcionales

Al ser literarios, la mayoría de los textos del género narrativo son ficcionales, porque, más allá de que hagan referencia a personajes o hechos reales, son construidos por la imaginación de un autor.

Además, deben ser verosímiles, es decir, que no pueden presentar contradicciones y que tienen que ser creíbles, aunque describan y narren sucesos fantásticos.

Sin embargo, algunos, como las biografías y las memorias, no son ficcionales, ya que relatan hechos que se presuponen verdaderos y que ocurrieron en la realidad.

Tienen un estilo

El estilo es el sello propio del autor. Se relaciona con cómo se organizan los distintos elementos de la obra, las ideas y los eventos; con la elección de determinadas palabras sobre otras; con la construcción de las oraciones y los párrafos; y con la utilización de las figuras retóricas y literarias.

Se clasifican en diversos subgéneros

Los textos del género narrativo se clasifican según distintos criterios, como su extensión, su tema y su finalidad, y pueden ser:

Cuento. Es un relato de breve extensión cuya trama se organiza en tres partes: introducción, nudo y desenlace.
Por ejemplo: “Josefina, la cantora, o el pueblo de los ratones”, de Franz Kafka.
Novela. Es un relato de gran extensión cuya trama es muy compleja, puesto que hay una gran cantidad de personajes y eventos.
Por ejemplo: El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes.
Mitos. Son relatos breves que explican el origen de diversos elementos de la cultura. Suelen estar protagonizados por dioses y héroes y, en muchos casos, tienen un carácter religioso.
Por ejemplo: “El mito de Teseo y el minotauro”, anónimo.
Leyendas. Son relatos breves de circulación oral que incluyen sucesos maravillosos y que suelen estar protagonizados por héroes, pero a diferencia de los mitos, ocurrieron en un tiempo histórico.
Por ejemplo: “La leyenda de los volcanes”, anónimo.
Fábulas. Son relatos breves que comenzaron siendo de circulación oral, cuyos personajes suelen ser humanos o animales personificados y que transmiten moralejas.
Por ejemplo: “El joven pastor que anunciaba al lobo”, de Esopo.
Epopeya. Es un relato extenso en verso que narra enfrentamientos bélicos e historias de héroes y que incluye diversos mitos y enseñanzas muy relevantes para un pueblo o una nación.
Por ejemplo: Odisea, de Homero.
Cantar de gesta. Es un relato extenso en verso que narra la historia de un héroe centrándose en sus hazañas en las batallas, su elevado carácter moral, su honra y sus cualidades sobrenaturales. Por ejemplo: Poema de mio Cid, anónimo.
Romance. Es un relato extenso en versos de ocho sílabas que narra una historia de amor, las hazañas de un héroe, un mito, entre otros.
Por ejemplo: Romances moriscos, de Lope de Vega.
Biografía. Es un relato extenso que narra la historia de una persona haciendo hincapié en sus acciones más relevantes. Si el personaje y el autor coinciden, se denomina autobiografía.
Por ejemplo: La historia de mi vida, de Helen Keller.
Crónica. Es un relato que tiene características del género periodístico, puesto que narra eventos que ocurrieron en la realidad, y de la literatura, porque emplea procedimientos típicos de los subgéneros de ficción.
Por ejemplo: Lo que hay que tener, de Tom Wolfe.
Diario. Es un relato en el que el narrador cuenta en primera persona eventos de su vida, reflexiones, sentimientos, pensamientos y emociones.
Por ejemplo: Diarios, de Alejandra Pizarnik.

Se cuentan desde un punto de vista

Los textos del género narrativo se cuentan desde uno o varios puntos de vista, es decir, desde la perspectiva de uno o más narradores. Según qué tipo de narrador se elija, serán diferentes su nivel de conocimiento sobre la trama y su participación en la historia.

De todas formas, todos los tipos de narrador revelan la información de a poco con el objetivo de generar intriga o suspenso y de captar la atención del lector.

Surgieron en los orígenes de la humanidad

Desde el comienzo de la humanidad, las personas contaban historias con el objetivo de transmitir enseñanzas, mitos o creencias religiosas o de entretener. Con el paso del tiempo, estos relatos fueron adquiriendo distintas características y se crearon diversos moldes narrativos. Por ejemplo, en la Antigüedad surgieron las epopeyas y las fábulas; en la Edad Media, los cantares de gesta; y en el Renacimiento, las novelas.

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Referencias

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Bobes Naves, M. C. (2015). Diálogo. En Diccionario Español de Términos Literarios Internacionales. http://www.proyectos.cchs.csic.es
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Reyzábal, M. V. (1998). Diccionario de términos literarios I y II. Acento.
Souriau, E. (1998). Diccionario Akal de estética. Ediciones Akal.